
Pranayama es mucho más que “la repiración del yoga”: es el arte de gestionar tu energía a través de tu manera de respirar. Pranayama puede convertirse en uno de tus aliados principales para tu bienestar y para tu equilibrio emocional.
En este post vas a aprender qué significa el término Pranayama, cuál es su origen y su sentido, por qué es tan importante en las prácticas de yoga y cómo puedes incorporarla en tu día a día para disfrutar de sus beneficios.
👂🏻 Si lo prefieres, puedes escuchar el contenido de este post aquí 👇🏻
El término original Pranayama proviene del sánscrito y hace referencia al Prana: la “energía vital” o fuerza de la vida. Pranayama es la expansión y extensión de esa energía vital, así como una herramienta para gestionarla.
Por tanto, la palabra no se vincula de forma directa con la respiración, sino con cómo manejas tu propia energía. Ahora bien: la manera de lograrlo es precisamente a través de la respiración.
En la antigua sabiduría hindú, se considera que la respiración es el puente que une el mundo consciente con el inconsciente.
Al fin y al cabo, somos capaces de mantener la respiración constante sin pensar en ello, pero también tenemos la capacidad de tomar el control consciente y dejar de respirar durante unos segundos, o hacerlo con un ritmo más rápido o más lento.
El objetivo principal de la práctica de Pranayama es gestionar la energía que tenemos “atrapada” dentro de nosotros, para que se libere y circule de una manera más equilibrada y pueda utilizarse de un modo más creativo y positivo para nuestro bienestar.
De hecho, la comunidad científica ha realizado numerosos estudios sobre los beneficios físicos y psicológicos de la práctica habitual de Pranayama.
Ya hemos visto que existen muchos beneficios físicos y psicológicos asociados a la práctica de respiración consciente. No obstante, el Pranayama va mucho más allá de simples ejercicios de respiración, y se considera uno de los pilares esenciales del yoga.
Para la visión más tradicional del Hatha Yoga (los orígenes de su práctica), el desarrollo se consigue mediante la práctica de:
Es decir: la práctica de Pranayama se considera uno de los pilares básicos para el desarrollo del cuerpo, de la mente y del espíritu. Te puede ayudar a sentirte mejor y a gestionar más fácilmente tus estados de ánimo.
💡 Por todo esto, muchas veces se simplifica la explicación del término diciendo que es “la respiración del yoga”, aunque el yoga sea mucho más que eso y aunque existan en realidad muchos tipos de respiración en el yoga 😉
Para que exista realmente esa gestión de la energía vital de la que habla la espiritualidad tradicional india, no basta solo con “respirar” (tomar y soltar aire). De hecho, solo podemos hablar de Pranayama cuando existe “retención del aire” (kumbhaka).
Los cuatro elementos del Pranayama son:
Si quieres empezar a practicar ejercicios de Pranayama, lo mejor es que te familiarices primero con la técnica en cada caso, sin hacer retenciones. Inhala y exhala de manera fluida y sin pausas.
Una vez que hayas mejorado tu control postural y respiratorio, podrás introducir poco a poco retenciones internas y externas, cortas al inicio y progresivamente más largas.
⚠️ Si tienes problemas de hipertensión y/o estás tomando medicación para tu tensión arterial, consulta a tu médico especialista antes de realizar ejercicios en apnea o con retenciones prolongadas del aire. ⚠️
¡Recuerda que estoy aquí para ayudarte! Pronto tendremos disponible un curso online de Pranayama. Contáctame por WhatsApp si deseas recibir más información 👇🏻
1 comentario
[…] olvidemos que Pranayama es mucho más que “la respiración del yoga”: es un conjunto de técnicas que permiten gestionar la energía vital, mejorar tu estado de ánimo […]